Podríamos contaros cómo transcurrió la gala, quién ganó, o cómo Aisha Eventos nos ayudó a poner todo en orden para garantizar que no se nos escapara nada. Podríamos describiros la fuerza que nos transmitió el maestro de ceremonias, Fernando Cayo, o la cara que dejó a los presentes ese cliente caradura que representó José Ovejas. Incluso nos podríamos parar en la producción de la gala, bien llevada por Irradia Creatividad. También podríamos pararnos en el momento dulce de la noche, que llegó gracias al toque maestro de Da Silva Gastronomía y ese bombón que sabe a premio al que tanto cariño le hemos puesto desde Microbio y desde Foro Ingenio. Pero es que hay más, mucho más.
También os podríamos contar un par de secretos. Que si no hubiera sido por la gente del LAVA, hubiéramos celebrado la gala debajo de un puente y nos hubieran faltado muchas ideas y mucha ayuda en el backstage, o que debemos media vida a los patrocinadores de Foro Ingenio, que se lo curraron para que pudiéramos hacer algo digno y gastaron su tiempo en acompañar a la fauna creativa de Castilla y León.
Por último, también podríamos decir que somos la leche y que hemos sido los presidentes de Foro Ingenio los que nos hemos currado todo, pero mentiríamos. Nada hubiera sido posible sin los consejos de Roberto, la mano amiga de Gustavo, el arte en los trofeos de Fernando, o las gestiones de Jose. Y sobre todo no hubiéramos podido hacer nada sin la santa paciencia de Conchi y la ESI, que nos dieron todo aquello que pedimos, incluso una P gigante que lo molaba todo.
Pero en vez de eso, que sería tontería, vamos a mostraos cómo se lo pasaron los que disfrutaron de la gala. Los nominados, los premiados, los asistentes y que carajo, ¡nosotros (aunque no ganáramos nada)! Por eso, aquí os dejamos una ristra de tuits que resumen lo bien que, como diría el otro, lo pasemos.
Y, aunque solo sean palabras, muchas gracias. Muchas gracias a todos los que habéis hecho posible que la primera gala de los Premios Inspira que tiene que organizar Microbio no haya sido un fracaso, si no que haya sido un buen día de creatividad, una fiesta que demuestra que sí, que en Castilla y León hay talento.
¡Muchas gracias, y hasta el año que viene!